Ya había leído acerca de este lugar, un buen sitio para tomar vino y jamón del rico, frente al Palacio de Oriente. Hacía tiempo que quería ir y ayer aprovechando un día de sol dimos una vuelta y decidimos entrar a tomar un vinito…
Nada más entrar nos sirvieron un caldito de jamón muy rico, gratis, después con el vino nos pusieron también una tapita de migas. En principio íbamos solo a tomar un vino, era un poco temprano para cenar, pero el plato de jamón de la mesa de al lado nos fascinó y la carta nos sedujo. Nos costó decirnos, todo sonaba exquisito, pero finalmente fuimos a por la tabla de Ibéricos (imperial) y la felicidad vino en forma de jamón, cecina, lomo, queso, salchichón y chorizo… No hay palabras para describir ese gustazo, y eso que me considero bastante exigente con los ibéricos. Las fotos no le hacen justicia, ¡no pudimos resistir mucho tiempo sin meterle mano al plato!
¡Después nos pusieron otra tapa de pisto gratis!
Los camareros muy amables y atentos, el lugar es acogedor y la localización inmejorable.
¡Nos gastamos 11€ por persona y acabamos con la panza llena y muy felices! ¡Desde luego volveré muchas veces!
Tapa de migas gratis con nuestro vino
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